La costra láctea es la expresión que se utiliza para denominar a la dermatitis seborreica del lactante, que afecta al cuero cabelludo. También se conoce como caspa cuando afecta a niños mayores o adultos.
Aparece con frecuencia en los recién nacidos y los niños de hasta tres años de edad. Se observan gruesas escamas de color blanco o amarillo que aparecen sobre el cuero cabelludo. La expresividad es variable, desde pequeñas escamas en áreas reducidas hasta prácticamente ocupar todo el cuero cabelludo. En algunos niños se asocia con presentación de estas escamas en pestañas, orejas, pliegue de la nariz, en la nuca, esto es lo que denominamos como dermatitis seborreica. En un pequeño porcentaje asocia secreción clara-amarillenta de las escamas.
¿Por qué aparece la costra láctea?
- Existe la falsa creencia que se debe a unos malos hábitos higiénicos.
- Realmente se desconocen las causas, existen varias teorías. Una piel más grasa con hiperproducción de sebo. Algunos investigadores piensan que puede haber una relación con un hongo, de hecho uno de los tratamientos en casos rebeldes es un tratamiento antifúngico.
- Tiene un carácter familiar. Es frecuente que nos encontramos familias con pieles grasas.
¿La costra láctea molesta al bebé?
Aunque nos parezca que pueda molestar al bebé la costra láctea aislada no suele dar síntomas al bebé. En ocasiones cuando es una dermatitis seborreica que afecta a cara y otras zonas puede generar cierto malestar.
Se puede presentar de diversas formas aunque muy similares:
- En forma de placas gruesas más típico en cuero cabelludo y cejas.
- Zonas más grasientas o aceitosas, cubiertas de pequeñas escamas blanquecinas o amarillentas.
- Escamas aisladas, que recuerdan a la caspa del adulto.
En ocasiones puede aparecer caída del cabello del cuero cabelludo afectado, tras recuperarse de la costra láctea reaparece dicho cabello.
Cómo tratar la costra láctea
En un primer momento no precisa de tratamiento, aunque algunos padres por el tema estético deciden eliminar las escamas del cuero cabelludo.
Un primer paso es con los propios dedos o con el peinado suave tras un baño con un champú suave se pueden retirar algunas escamas.
Si no se logran retirar con facilidad, se puede usar o vaselina o aceite. Importante dejar la aplicación unos minutos para que se empapen las escamas y posteriormente con el champú y el cepillado se puedan retirar las escamas. Retirar bien el aceite o la vaselina, ya que su acúmulo puede favorecer que se mantenga la costra láctea.
Un tercer escalón, si no hay respuesta con estos remedios y con un champú suave es valorar otro tipos de champús, aunque antes recomendamos valoración por el pediatra que sea quién debe aconsejar. Existen distintos productos que se incluyen en champús específicos. Su forma de aplicación es similar a la de la vaselina o aceite, tras aplicarlo dejar actuar unos minutos y posteriormente aclarar. De este modo se favorecerá la retirada de las escamas.
Si además presenta en otras zonas distintas del cuero cabelludo antes de aplicar ninguna crema específica consulte con su pediatra.
¿Debemos acudir al pediatra si aparece la costra láctea?
Como hemos dicho es algo relativamente frecuente. Desde IMED Valencia queremos indicar en que situaciones se agrava la dermatitis y se aconseja nuestra valoración:
- No respuesta a los tratamientos domésticos
- Ha empeorado o cubre extensas áreas del cuerpo del bebé
- Ha iniciado caída del pelo de las zonas con la costra
- El área de piel afectada se vuelve dura y roja, empieza a supurar y/o se nota caliente, lo que podría indicar la presencia de una infección
Es una afección frecuente, no preocupante, que se suele resolver espontáneamente, aunque en ocasiones puede reaparecer. Recordar que en algunas ocasiones precisará de la evaluación por parte del pediatra.
